Industria 4.0: de la Ficción a la Realidad

A lo largo de la historia, el ser humano ha empleado la tecnología como herramienta para mejorar su calidad de vida, y la industria no es más que una prueba de ello. En sus comienzos, el uso de nuevas formas de mecanización dieron lugar al procesamiento de materias primas para el aprovechamiento del medio ambiente.

Desde entonces, ha evolucionado pasando por la segunda revolución -en la que las fuentes de energía como la electricidad, el gas y el petróleo jugaron un rol principal- y la tercera, que se basa en la energía nuclear y el uso de la electrónica. Todas estas etapas generaron cambios radicales que despejaron el camino para la cuarta revolución industrial, mejor conocida como la industria 4.0.

¿Qué es la industria 4.0?

En esencia, esta innovación busca unir a los seres humanos, los robots y la automatización en formas que no se creían posibles. De esta forma, se crea un nuevo nivel en que la industria abarca los ámbitos de la recolección de materiales, la manufactura, el envío, soporte, mantenimiento e incluso, el reciclaje del producto.

El objetivo es organizar los medios de producción de una forma más eficiente para crear fábricas inteligentes que puedan utilizar mejor los recursos y adaptarse a los procesos y tendencias de la producción en tiempo real.

¿Cómo funciona?

La industria 4.0 funciona en conjunto con elementos que han surgido durante los últimos años y que poco tiempo atrás eran considerados únicamente como parte de las historias de ciencia ficción. Esta tecnología, en forma generalizada, funciona mediante la aplicación de las siguientes rutinas:

1. Adquisición de la información por medio del Internet de las Cosas.

2. Análisis de la información para la toma de decisiones.

3. Interpretación de los resultados por medio de inteligencia artificial.

4. La sección robótica o física ejecuta los procesos productivos.

5. Aprendizaje a partir de las acciones realizadas.

La relevancia del sistema moderno

Cada revolución industrial trae consigo características intrínsecas que le dan un giro radical a la aplicación de la tecnología. En el caso de la cuarta revolución industrial, existe una serie de aspectos que hacen muy relevante su implementación.

Interoperabilidad

Este sistema permite mantener una red de comunicación que conecta al personal, los sensores, la maquinaria e incluso, los dispositivos. De esta manera todo se encuentra sincronizado para un mayor nivel de eficiencia en la producción.

Transparencia de la información

Los sistemas de TI crean copias virtuales de lo que ocurre en el mundo físico a través de múltiples sensores para contextualizar la información. Así, se pueden ver las fallas de los mecanismos en tiempo real y aplicar los cambios necesarios rápidamente.

Asistencia técnica

En muchos casos, es necesario que el personal sea asistido por el sistema a través de la adición y visualización integral de la información. Además, algunas tomas de decisiones, soluciones de problemas urgentes y estructuras ciberfísicas pueden ser ejecutadas para evitar colocar a los empleados en situaciones difíciles o peligrosas.

Decisiones descentralizadas

Las fábricas tienden a guiarse por una cadena de mando y en ocasiones, las personas responsables no se encuentran disponibles para tomar ciertas decisiones. La industria 4.0 permite su apoyo en ciertas decisiones simples para que pueda actuar de la forma más autónoma posible.