El aceite dieléctrico es un lubricante mineral diseñado para la transmisión y el aislamiento de la electricidad, a diferencia de otros que no involucran dichas tareas. El aceite de transformador también sirve para el enfriamiento, y por el uso, al igual que cualquier lubricante, se tiene que cambiar dicho aceite con el paso del tiempo como parte del mantenimiento habitual que previene daños y reparaciones costosas.
¿Cuándo cambiarlo?
Conforme pasan las horas de uso de un transformador, el aceite dieléctrico pierde algunas de sus capacidades de aislamiento y enfriamiento: se vuelve deficiente. Si se le da el uso y mantenimiento correctos al transformador, ocurrirá poca descomposición por oxidación del aceite, y gracias a la captura de contaminantes, que es una de las principales tareas del aceite lubricante.
La oxidación del aceite dieléctrico es un ácido que se forma en el lubricante cuando entra en contacto con el oxígeno, y comienza a formar una especie de lodo que no le permite disipar el calor, por lo que las bobinas tendrán una mayor temperatura, lo que generará mayor descomposición del aceite dieléctrico y al final.
Los contaminantes que se pueden encontrar en el aceite dieléctrico normalmente son partículas de humedad, que no solamente reducen las capacidades de aislamiento del aceite, sino genera una gran corrosión abundante en los componentes.
Mantenimiento del transformador
Como parte integral del mantenimiento de un transformador, revisa la calidad en la que se encuentra el aceite dieléctrico, con el fin de garantizar que sus cualidades protectoras se encuentran protegiendo el motor.
Los siguientes 5 pasos te ayudarán a garantizar que el aceite dieléctrico funciona adecuadamente. De lo contrario, deberás realizar un cambio de aceite de manera inmediata:
- La conductividad de un aceite dieléctrico se reduce o aumenta por ciertos contaminantes y agentes corrosivos. Revisa el voltaje transferido por el aceite.
- La prueba del ácido determinará si puede incrementar la viscosidad y reducir el enfriamiento.
- La tensión superficial indicará si existen agentes oxidantes en el lubricante.
- Si el color ha cambiado radicalmente significa que el aceite dieléctrico tiene contaminantes o ya es viejo.
- Contenido de agua. Prueba la cantidad de agua presente dentro del sistema, en partes por millón, que puede afectar la fuerza dieléctrica y generar corrosión dentro del transformador.
Los resultados de estas pruebas determinarán las acciones que deberás de tomar para el mantenimiento del transformador o si es necesario realizar un mayor número de pruebas para garantizar su buen funcionamiento.
Como todos los elementos, el transformador requiere mantenimiento, pero se verá beneficiado si utilizas un aceite de transformador adecuado, que le ayudará a:
- Reducir costos de aceite por su alta resistencia a la oxidación, alta capacidad dieléctrica, estabilidad térmica y protección al equipo.
- Amistosos con el medio ambiente, ya que son aceites libres de PCB’s (bifenilos policlorados).
Si quieres más consejos de cómo darles mantenimiento a tus equipos industriales, da clic aquí.